El paro nacional contra la reforma tributaria que impulsa el Gobierno, fijado para el próximo 28 de abril, tendrá que vérselas con las nuevas medidas para mitigar el tercer pico de la pandemia del coronavirus, que regirán entre el 19 de abril y el 3 de mayo.
Dichas medidas abarcan toque de queda nocturno y ‘pico y cédula’, incluso en el transporte público, y estarán vigentes en ciudades y municipios cuya ocupación en Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) sea superior al 85 por ciento.
Todo indica, por las cifras, que Cali, Medellín, Barranquilla y Bogotá deberán aplicarlas.
Municipios con ocupación más baja -entre el 80 y 85 por ciento- también tendrán toque de queda, aunque se espera que menos largo, y aquellos con un porcentaje aún menor -entre el 70 y 79 por ciento- tendrán una restricción más flexible.
Quienes marchen el 28 de abril tendrían que acatar estos horarios y, además, saber que no podrán movilizarse en el transporte público, según les corresponda por el ‘pico y cédula’. Esto haría difícil seguir a quienes impulsan la idea de una protesta de duración indefinida.
Fuente EL TIEMPO