A tan solo cinco días del inicio del estado de prevención, declarado por el Área Metropolitana debido al deterioro de la calidad del aire en el Valle de Aburrá, la ciudad amaneció con 13 de las 18 estaciones instaladas por el Siata (Sistema de Alerta Temprana local) en color naranja.
Esto quiere decir que el aire es dañino para grupos poblacionales sensibles. Las ubicadas en Itagüi, El Poblado en Medellín, Girardota y La Estrella, eran los radares con mayores indicadores de contaminación; mientras que las dos estaciones de tráfico o industriales, una ubicada en el centro y otra en el sur, también estaban en color naranja.
Recordemos que la calidad del aire se mide con la cantidad de material particulado (PM 2,5) en el ambiente. De acuerdo con el Siata, aunque las partículas 2,5 son quizás el mayor peligro para la salud de los ciudadanos, existe un promedio diario que es tolerable para el cuerpo humano:
Bueno: 0 a 12.4 microgramos por metro cúbico.
Moderado: 12.5 a 35.4 microgramos por metro cúbico.
Dañina a grupos sensibles*: 35.5 a 55.4 microgramos por metro cúbico.
Dañino: de 55 microgramos por metro cúbico en adelante.
*Los grupos sensibles son los niños, adultos mayores y personas con enfermedades respiratorias.
La medición registrada por el Siata fue tomada a las 6:30 a.m. de este miércoles; no obstante, desde el martes de esta semana se evidenció fotográficamente que la contaminación estaba llegando a niveles altos en la ciudad.
Según un informe de la Contraloría de Medellín, elaborado con apoyo del Instituto de Ambiental de la Universidad Nacional, entre el 2012 y el 2016 murieron 22.922 personas por causas relacionadas con enfermedades respiratorias agudas en Medellín.
Belén, Laureles y Estadio, las zonas de la capital antioqueña donde más se presentó este fenómeno, con un rango de 600 a 900 casos reportados.
El estudio elaborado por la Contraloría fue titulado “Cuantificación física y económica del impacto de la contaminación atmosférica en la salud de la población de Medellín”, y puso el tema sobre la mesa ad portas del inicio del estado de prevención decretado por el Área Metropolitana.
El pico y placa ambiental comenzará a regir en los 10 municipios del Valle de Aburrá a partir del 18 de febrero, y su objetivo es mitigar la contaminación del aire que se ha convertido en una contingencia habitual (cada año) ara la región en los meses de febrero y marzo.
FUENTE EL COLOMBIANO