La recuperación económica será dispar en 2021

En las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial de los últimos días se ha destacado que, luego de superarse las cuarentenas estrictas del segundo trimestre de 2020, los indicadores de la actividad económica en la mayor parte del mundo han mostrado un rebote secuencial (ver ¿Qué sigue?).

Esto marca, según los analistas económicos de Bancolombia, el inicio de un proceso de recuperación que tomará varios años y que deberá sortear múltiples altibajos.

En ese contexto, los expertos de esa entidad financiera consideran que la economía colombiana observará una recuperación que se producirá luego de superar la fase más crítica de la pandemia y estará liderada por sectores que tendrán, al final del año próximo, un tamaño mayor al que presentaban antes de la llegada de la covid-19, como la agricultura, los sectores financiero e inmobiliario y los servicios públicos.

Entre las actividades que se recuperarán, pero permanecerán por debajo de los niveles vigentes en 2019 están el comercio, la industria, la minería y la construcción.

Al cierre del tercer trimestre se prevé que la actividad productiva en el país ganó tracción, al mostrar unas contracciones más moderadas desde que se reportaron los primeros casos de la covid. En este comportamiento fue determinante el levantamiento del aislamiento preventivo obligatorio a finales de agosto.

En las cuentas del Grupo Bancolombia el Producto Interno Bruto (PIB) se contraerá este año un 7,5 %, y en 2021 se volverá a ubicar en campo positivo con un 5,5 % (ver gráfico).

Más pronósticos

Por su parte, los 30 analistas que respondieron la más reciente Encuesta Mensual de Expectativas Económicas del Banco de la República señalaron que durante el tercer trimestre de este año (julio-septiembre) la variación del PIB fue negativa de 8,83 %, no obstante, vale anotar que el indicador solo lo revelará el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) el próximo 17 de noviembre.

En la encuesta, los expertos también pronosticaron que para el último cuarto del año, es decir el periodo comprendido entre octubre y diciembre) y el primer trimestre del año 2021 el PIB volverá a ser negativo y se ubicará en 4,88 % y 1,08 %, respectivamente.

Los valores positivos se volverían a ver a partir del segundo trimestre de 2021 (abril-junio) cuando se prevé un crecimiento de 10,02 %.

FUENTE EL COLOMBIANO

¿Podría haber una nueva cuarentena en Antioquia?

Antioquia quedó a cuatro camas de llegar de nuevo al límite que enciende la alarma. Así lo declaró la secretaria de salud del departamento, Lina Bustamante, al confirmar que si se alcanza 80% de ocupación de Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) y se mantiene ese indicador durante tres días, será necesario declarar de nuevo la alerta roja hospitalaria.

A ese hecho se le suman los aumentos de casos positivos confirmados en el departamento, que durante cinco de los últimos seis días fueron los más abundantes del país, superando a Bogotá con cifras cercanas y superiores a los 2.000 casos diagnosticados cada día. Hasta el lunes, la ocupación de UCI para atención general y covid-19 en Bogotá alcanzó 62,9 %, con la ocupación de 1.368 de 2.175 camas disponibles.

Según Bustamante, el aumento de positivos era predecible debido a las medidas de reactivación económica que pronosticaban que a mayor movilización de personas e incumplimiento de protocolos de bioseguridad se generarían más contagiados.

¿Qué está pasando?

Según Bustamante, durante los primeros meses, junto con el Ministerio de Salud y Protección Social, la Gobernación preparó el sistema de atención y los protocolos de bioseguridad y autocuidado ciudadano. Desde septiembre, añadió la funcionaria, luego de la apertura económico plena, la curva de contagios aumentó por la mayor exposición pública y el no acatamiento de medidas de autocuidado.

En eso concuerda Yéssica Giraldo, médica epidemióloga e investigadora de la Universidad CES, quien argumenta que el aumento de contagios, desde su perspectiva, va en dos direcciones. La primera tiene que ver con la mayor movilización de personas, sin embargo, añadió, también es claro que ha habido un relajamiento general en la población antioqueña que tiende a pensar que la situación está controlada, sin analizar esa posibilidad de riesgo.

La segunda tiene que ver con la percepción que están teniendo los ciudadanos sobre el virus y que depende mucho de cómo se les comunique desde las autoridades, afirmó la epidemióloga. “Se les dice a los ciudadanos que no salgan, que se cuiden y luego se les pide que ayuden a la reactivación de la economía y aprovechen la semana de receso. Ese mensaje, a la larga, deja en el imaginario colectivo que las cosas van por buen camino y que no hay tanto riesgo como antes”, sostuvo.

Por su parte Leopoldo Giraldo, gerente para la atención de la covid en Antioquia, concuerda con que la población “sigue pensando de manera muy tranquila sobre la covid. Para avanzar en la apertura que tenemos siempre hemos planteado que es necesario cumplir a cabalidad con los protocolos”, anotó.

Sumado a eso, la Secretaría de Salud asegura que se están haciendo más pruebas que antes, con un promedio de 6.000 pruebas al día, pero con una diferencia: “Antes las hacíamos en búsqueda activa comunitaria, cuando íbamos a una comuna y aplicábamos pruebas aleatorias; ahora se están haciendo focalizadas, donde buscamos quién ha tenido contacto estrecho con positivos y les aplicamos el test”, precisó Bustamante.

Ese número de pruebas se analizan en los 21 laboratorios que están autorizados en Antioquia, los cuales, en conjunto, tienen una capacidad de procesar 10.000 pruebas, según datos del Instituto Nacional de Salud.

“Entonces son insuficientes, porque según los modelos internacionales a los que le apuesta Colombia, por cada caso positivo se deberían realizarse unas 20 pruebas más, para detectar su cerco epidemiológico. Acá estamos lejos de eso y ni siquiera llegamos al tope de las pruebas que podrían evaluarse en un día con los laboratorios que tenemos”, dijo Yéssica Giraldo.

La capacidad hospitalaria

Los aumentos de casos se traducen en más personas que deben ingresar a los centros de salud y a las UCI. Sin embargo, ese porcentaje de ocupación de camas no solo es de pacientes covid.

“Las Unidades de Cuidado Intensivo están siendo ocupadas por otros personas que salen de una operación o que padecen otras enfermedades”, afirmó Bustamante, explicando que la alerta roja se declararía para volver a restringir los servicios en clínicas y hospitales atendiendo solo procedimientos urgentes. Así se liberarían camas para atender eventuales picos de pacientes críticos por coronavirus.

Cabe aclarar que respecto a la cantidad de camas en UCI, el departamento cuenta con 923 para pacientes con covid-19, de estas últimas hay 705 ocupadas, entre pacientes confirmados y sospechosos.

Es decir, que la ocupación en el departamento, según el reporte del lunes 12 de octubre, es de 76,38 %.

Por otro lado, el último pico de muertes se presentó entre el 2 y el 12 de agosto, con un promedio de 43 personas. En septiembre la cifra se estabilizó pasando a un promedio de 19 y en la última semana volvió a una media de 27 cada día, lo que significa que las muertes están aumentando de nuevo.

De esos fallecimientos, lo que se conoce es que “80% son adultos mayores y que 50 % de las personas que ingresan a UCI no salen con vida. Por lo que hay que cuidar aún más esas poblaciones vulnerables”, dijo Bustamante.

¿Habrá nuevas medidas?

Además de la posible alerta roja hospitalaria, las autoridades no descartan retomar otras restricciones.

“Nos preocupan las fechas que movilizan mucho a la población, como el pasado Día de Amor y Amistad y el puente de este fin de semana en los municipios”, dijo Bustamante.

Pero lo que determinará si hay cierres o no será cómo se siga comportando esa curva epidemiológica. “Será un tema que se tendrá que evaluar entre mandatarios locales y el Ministerio del Interior”, indicó la titular de la cartera de salud.

No obstante, lo que sí está claro es que “la única forma de bajar ese contagio es con algunas restricciones”, declaró la secretaria, y agregó que no necesariamente deberán ser tan severas como en los primeros tres meses de la pandemia, por ejemplo, se podrían retomar los toques de queda o las medidas de 4 o 5 días de apertura por 3 o 2 de cierres.

En eso concuerda el gerente Giraldo, quien descartó una nueva cuarentena para los próximos días. “Seguiremos fortaleciendo los protocolos para que eso nos permita la contención de los contagios. La idea es que podamos controlar desde lo individual para no tener que llegar a los cierres generales. Eso sí, de ser necesario, tendremos que poner por encima la vida de las personas y habrá que solicitar los cierres necesarios”, concluyó Leopoldo Giraldo.

Esteban Restrepo, secretario de Gobierno de Medellín, dijo que por ahora la alcaldía no contempla nuevas restricciones o cierres, sin embargo, continúa el monitoreo. “La apertura se mantiene solo si es seguro para la ciudadanía, por eso es importante el autocuidado. No bajemos la guardia”, finalizó.

FUENTE EL COLOMBIANO

¿Antioquia está lista en caso de un rebrote de covid?

El pasado 15 de septiembre el alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle, anunció que su gobierno había hecho realidad el Plan Mil, es decir, que la ciudad ya tenía ese número de camas de cuidados intensivos (UCI) para enfrentar la pandemia.

Los registros de la Secretaría Seccional de Salud de Antioquia, entidad que habilita (autoriza) cada servicio médico que se abre, indican que en todo el departamento hay 1.163 camas de cuidados intensivos. Y entonces surge la duda: ¿por fuera de Medellín solo hay 163 camas UCI?

El gobernador (e) de Antioquia, Luis Fernando Suárez, explicó que la Secretaría de Salud tiene habilitadas en la ciudad 602 camas de UCI. “Esas son camas efectivas, que están en servicio”, aclaró.

La diferencia entonces radica en las camas que Medellín cuenta dentro de sus estadísticas, pero que no están en servicio. La secretaría de Salud municipal informó a través de su sistema MEData que de las 1.000 camas que supuestamente tiene la ciudad, hay 220 que están por activar y otras 200 pendientes por aprobación del Invima.

Estas últimas corresponden a los respiradores que se desarrollaron bajo el proyecto InnspiraMed, y que aún están en fase de pruebas.

“Si esas camas no están aprobadas, yo no las puedo contar. Por eso no se puede decir que Medellín tiene 1.000 camas, las cuentas no dan”, agregó Suárez.

Cruce de cifras

EL COLOMBIANO le preguntó a la Alcaldía de Medellín por qué las cifras diferían entre un gobierno y otro. A través de la Secretaría de Salud, respondieron: “La Gobernación responde a los 125 municipios de Antioquia y Medellín solo se centra en la ciudad. En el Registro Especial de Prestadores de Servicios de Salud (REPS), Antioquia tiene 773 camas activas para adultos al igual que Medellín, más 7 camas para niños y niñas que Gobernación no cuenta”.

Al primero de octubre de 2020, el Reps, registro oficial del Ministerio de Salud, indica que Medellín tiene 695 camas de UCI, de las cuales 566 son para adultos, 50 pediátricas y 79 para recién nacido.

Las cifras siguen sin cuadrar. Johana Gómez, enfermera y especialista en Gerencia de Salud, explicó que los registros del MinSalud toman en cuenta camas que pueden no estar en servicio, pero que están habilitadas. “Si hay un brote de covid en una clínica y cierran esas camas, el Ministerio no se entera y las sigue contando porque una vez se resuelva eso, las camas vuelven a operar”, dijo.

El gobernador Suárez aclaró que el gobierno departamental cuenta las camas habilitadas (con permiso para operar) y que a través del CRUE (Centro regulador de urgencias y emergencias) se lleva un monitoreo diario de la ocupación y con eso se mide cuántas camas disponibles hay y cuántas están ocupadas.

La alcaldía, como consta en MEData, cuenta las camas que no están ni siquiera listas para operar.

Lo que crecimos

Antes de que el coronavirus llegara a Antioquia, el departamento tenía 480 camas UCI, según los registros oficiales.

“El Ministerio nos mandó a dividir esas camas en dos y quedaron 240 para covid y 240 para otras patologías. De ahí crecimos hasta 920 camas. ¿Pero son 920 camas nuevas? No, son 920 menos 240; es decir, 680 nuevas camas”, dijo. Las cifras que él menciona incluyen a Medellín.

Entre tanto la Secretaría de Salud de la capital antioqueña reporta que para marzo la ciudad tenía 332 camas de UCI. Agrega que para junio ya había 500 camas, que en agosto se llegó a 959 y que en septiembre se completaron las 1.000. Nuevamente la línea base no es cero, sino las 332 existentes, por lo que tampoco se puede decir que la ciudad tiene mil camas nuevas.

Este diario preguntó cuánto invirtió la alcaldía en esas camas y qué pasaba con las no habilitadas, pero no obtuvo respuesta. Lo que sí aclaró el gobierno municipal es que 332 de las nuevas camas llegaron gracias a aportes del Gobierno Nacional, que 540 se abrieron con recursos propios de las IPS (hospitales y clínicas) y que 118 se financiaron con “fortalecimiento de la Alcaldía de Medellín” .

FUENTE EL COLOMBIANO

Avanzan pruebas para determinar si hay recontagio de coronavirus

La posibilidad de que alguien contraiga coronavirus dos veces es una de las nuevas preocupaciones para las autoridades de salud en Antioquia.

El gobernador (e) Luis Fernando Suárez le explicó a EL COLOMBIANO que el personal de la Secretaría de Salud está estudiando cuatro casos de personas que podrían haber tenido covid-19 dos veces.

“Lo que hay hoy en la literatura es que la inmunidad dura tres meses. O sea, yo estoy libre hasta octubre y de ahí para arriba échese la bendición y cuídese más, porque puede pegar más duro”, dijo el mandatario, quien además es epidemiólogo y se contagió con el virus en julio.

Suárez explicó que entre los casos en estudio figura el de una persona que falleció y está por determinarse si ocurrió por un segundo contagio.

Leopoldo Giraldo, gerente para la contención del coronavirus en Antioquia, aclaró que en el mundo se han documentado casos de personas reinfectadas, pero que “no es lo general, es algo muy particular”.

En ese sentido, señaló que en Antioquia se está tomando como referente un periodo de inmunidad de tres meses; es decir, que al paciente en los 90 días siguientes al contagio no le repite la enfermedad: “Estamos revisando casos de pacientes a los que posiblemente les haya repetido después de pasar ese periodo. Estamos haciéndole seguimiento, hay que validarlo y confirmarlo para que no termine siendo una especulación, porque son muy poquitos los reportes de eso que hay en el mundo”.

Primeros reportes

En mayo la Secretaría de Salud reportó nueve eventos de recurrencia en Antioquia. Y aunque algunos lo interpretaron como doble contagio, Juan Pablo Hernández, director del Laboratorio One Health de la Universidad Nacional, explicó que son dos cosas distintas.

“Las recurrencias de mayo eran pacientes a los que las pruebas les daban y les daban positivas. En ese momento hacíamos pruebas para confirmar la recuperación”, dijo.

Los recontagios, aclaró, son casos en los que alguien que se contagió con alguna cepa del SARS-CoV-2 (el virus que causa la covid-19), pasó su periodo de inmunidad de entre uno y tres meses, y volvió a contagiarse con alguna otra cepa (mutación) del virus.

Hernández confirmó que hasta el momento en Antioquia se han tenido cuatro reportes de posibles recontagios y que dos de ellos, un hombre y una mujer, ya fueron descartados. Entre los casos en estudio está el de una mujer que falleció y de la que se sospecha que pudo volver a contagiarse. Aún no hay conclusiones sobre ese caso.

“Confirmar eso es difícil porque tengo que determinar que todos los diagnósticos son correctos. Si detecto los dos eventos, tengo que hacer secuenciaciones y eso toma tiempo y cultivos (…) Por cada paciente puedo necesitar entre seis y 10 diagnósticos, lo que hace que sea caro, lento y complejo”, agregó.

Según Hernández, las autoridades tienen puestos los ojos en los recontagios porque se producen cuando hay cepas distintas. Hasta ahora, como el país tenía las fronteras cerradas, las cepas eran las mismas, pero probablemente distintas a las de otros continentes. Con la reactivación de vuelos es posible que la gente se pueda enfermar al estar expuesta a otras cepas.

Andrés Rangel, coordinador del LivingLab de Telesalud de la Universidad de Antioquia, explicó que lo peligroso de este recontagio es que la persona puede transmitir el virus; es decir, infectar a muchas otras.

Respecto a la dificultad en el diagnóstico señaló que en Latinoamérica en particular, apenas se está captando y documentando entre el 9 y 13 % de la pandemia: “La mayoría de contagiados tiene síntomas leves o no tiene, entonces no se hace diagnóstico y por eso no sabemos de esos casos. Y como ya dijimos, se requiere que estén confirmados los dos diagnósticos”.

En ese sentido el gobernador Suárez señaló que las estimaciones de sus epidemiólogos indican que apenas se ha contagiado entre el 12 y 15 % de la población, una cifra baja si se compara con otras ciudades como Montería donde el 45 % de los habitantes ya lo habrían contraído. Sin contar con que hay falsos positivos, es decir, pruebas con resultados errados.

Por eso los expertos consultados coincidieron en señalar que aunque haya habido un contagio es necesario que no se baje la guardia en cuidados como el uso del tapabocas y el lavado de manos .

FUENTE EL COLOMBIANO

Ciudadanos vuelven a la protesta masiva

Ayer en la mañana la protesta inició de manera pacífica. Durante el largo recorrido que se dio por las principales vías del país en ciudades como Bogotá, Cali, Medellín, Barranquilla y Pasto, los manifestantes arengaron en contra del gobierno y del abuso policial demostrado esta vez con el asesinato de Javier Ordóñez, ocurrido el 9 de septiembre pasado en Bogotá. (ver radiografía).

“Hoy nos sumamos a esta gran movilización para exigir al Gobierno Nacional mejores condiciones, mayor seguridad, esa reforma estructural a la fuerza pública; exigiendo una reforma general al sistema general de participaciones para incrementar los recursos de educación, servicios públicos, saneamiento y agua potable”, afirmó Nelson Alarcón, presidente de Fecode, uno de los organizadores de las manifestaciones.

El Comité Nacional del Paro también buscaba con estas protestas masivas exigir que el gobierno revise y avance en el pliego de emergencia presentado, en el que se solicita la implementación de una renta básica, subsidios a la nómina, matrícula cero, entre otros.

En Bogotá diferentes manifestaciones cruzaron la ciudad hasta llegar a la Plaza de Bolívar; y en Medellín una caravana de vehículos salió del Parque Débora Arango, en Envigado, y los estudiantes salieron desde el ITM Robledo, todos marcharon en dirección al Parque de las Luces.

En la mañana de ayer, el comandante de la Policía, general Óscar Atehortúa, aseguró que “los policías que acompañen las marchas y realicen actividades preventivas, no llevarán armas letales; los que trabajen en actividades de convivencia y seguridad ciudadana, llevarán armas de fuego”.

Los desmanes

Aunque por varias horas la protesta fue pacífica, al caer la tarde se presentaron desmanes. A las 4:30 cuando los primeros manifestantes llegaron a la Plaza de Bolívar de Bogotá un pequeño grupo de vándalos destruyó la fachada del Banco Caja Social, a los pocos minutos salió el Esmad que estaba resguardado en el Palacio de Justicia e inició la confrontación, mientras algunas personas lanzaban piedras desde la plaza, los policías lanzaban gases y aturdidoras.

“Como lo advertimos garantizamos la protesta pacífica, sin violencia. Ante cualquier acto vandálico o violento el Esmad tiene autorización de intervenir con gases, sin armas letales, para dispersar actos vandálicos o violentos”, trinó la alcaldesa Claudia López hacia las 5:00 de la tarde.

En Medellín los actos violentos inciaron a las 6:00 p.m. De acuerdo con el general Eliécer Camacho, comandante de la Policía de Metropolitana, en la noche vandalizaron el comando de Policía Metropolitana del Valle de Aburrá y le prendieron fuego, al cierre de esta edición no se había establecido si se presentaron heridos, ni el costo de los daños. Así mismo, el Esmad trató de controlar los mitines en la Avenida Oriental.

FUENTE EL COLOMBIANO

Gobierno Nacional autorizó 14 nuevas rutas aéreas

Entre las rutas aprobadas está la del Alfonso Bonilla Aragón de Palmira, que sirve a Cali, hacia los aeropuertos José María Córdova de Rionegro y Ernesto Cortissoz del municipio de Soledad, que sirve a Barranquilla.

El Gobierno Nacional autorizó rutas aéreas desde el Aeropuerto Alfonso Bonilla Aragón de Palmira, que sirve a Cali, hacia los aeropuertos José María Córdova, de Rionegro, y Ernesto Cortissoz del municipio de Soledad, que sirve a Barranquilla.

También se autorizó rutas desde el Aeropuerto Olaya Herrera de Medellín hacia los aeropuertos El Edén, de Armenia; Camilo Daza, de Cúcuta; Los Garzones, de Montería; Matecaña, de Pereira; Gustavo Rojas Pinilla, de San Andrés; El Tomín, de El Bagre; Golfo de Morrosquillo, de Santiago de Tolú, Alí Piedrahita, de Urrao, y el aeropuerto de Caucasia.

Asimismo, se dio autorización a la ruta desde el Aeropuerto Internacional Camilo Daza de Cúcuta al Aeropuerto Santiago Pérez Quiroz de Arauca.

Finalmente, también fueron aprobadas rutas desde el Aeropuerto Internacional Matecaña de Pereira hacia los Aeropuertos Internacionales Gustavo Rojas Pinilla de San Andrés y Rafael Núñez de Cartagena.

El Gobierno explicó que la operación aérea de estas rutas deberá efectuarse bajo el estricto cumplimiento del Protocolo de Bioseguridad por parte de todos los aeropuertos autorizados, elaborado por la Aeronáutica Civil y establecido en la Resolución 1054 de 2020 del Ministerio de Salud y Protección Social.

Hay que recordar que, bajo la actual normatividad expedida por el Gobierno Nacional, son los alcaldes, quienes bajo sus consideraciones y de acuerdo con la evolución del contagio en sus ciudades, pueden, de manera autónoma, solicitar la inclusión de sus aeropuertos en el plan de reactivación gradual de la operación aérea para la conectividad esencial.

FUENTE EL ESPECTADOR