Destacada
El dólar está a la espera de Turquía y Argentina.
Otra vez el dólar en el país inicia la semana por encima de los 3 mil pesos. La tasa representativa del mercado, que cerró el pasado viernes en 3.053 pesos (nivel más alto del último año), supone volver a poner sobre el papel lo que puede ocurrir con esa moneda y con la devaluación del peso colombiano. El incremento en el precio del dólar fue de 95 pesos si se compara con los 2.958 a los que inició la semana pasada.
¿Pero de qué depende que el dólar vuelva a cotizarse por debajo de los 3.000? Básicamente de que los fenómenos internacionales asociados a la guerra comercial y al impacto que siga teniendo la depreciación del peso en Argentina.
Así lo confirma Otman Gordillo, director de estrategia de AdCap. El experto cree que un cambio sobre lo que ocurra en la fluctuación de la moneda dependerá únicamente de qué tanto se mantengan estas coyuntura: “Si el alza se mantiene dependerá de qué tanto perduren estos fenómenos. No se sabe cuándo terminará la disputa entre EE.UU. y Turquía, por ejemplo”.
En el caso de la guerra comercial la crisis se agudizó por la renuncia del vicegobernador del banco central Turco, Erkan Kilimci. La decisión del funcionario tendría su razón en lo inmanejable que parece estar convirtiéndose la situación en la nación europea.
Crisis que ha hecho que la lira, su moneda, cayera un 31 % (en este mes), con respecto a la divisa norteamericana. En este punto vale recordar que según el índice MSCI la guerra ha generado que las monedas de países emergentes se devalúen 6 %, desde abril de 2018.
El panorama argentino también se avista para medir el aceite sobre lo que pueda ocurrir con la moneda estadounidense de cara a las economías emergentes del mundo, como la colombiana.
El coletazo que sienta Colombia puede traducirse en un temor por parte de las naciones más desarrolladas a interesarse por aterrizar en mercados emergentes a raíz del mal momento que vive la economía del país liderado por Mauricio Macri. La semana que acaba de pasar el gobierno argentino solicitó al Fondo Monetario Internacional prontitud en el desembolso de pagos desde el organismo, lo que demostró la urgencia y el nivel de crisis de cara a la financiación que requiere Argentina para el próximo año.
Por ahora Colombia respira tranquila, pues el hecho de que el precio en el barril de petróleo referencia Brent se sitúe en los 70 dólares, supone una estabilidad fiscal con respecto a las crisis mundiales.
FUENTE EL COLOMBIANO
Concejo debatirá venta de activos de EPM
Ante el Concejo de Medellín, el alcalde Federico Gutiérrez radicó el proyecto de acuerdo No. 150 de 2018, que busca autorización para que EPM pueda vender algunos activos y participaciones accionarias, con el fin de tener mayor solvencia para resolver la crisis de Hidroituango.
En el documento, Gutiérrez y EPM explican que hoy se estima un atraso de al menos 36 meses en la entrada en operación del proyecto “lo que ocasionaría una disminución del Ebitda producto de la venta de energía generada, estimada en $3,9 billones”.
La demora en la generación y la afectación financiera podría poner en riesgo la calificación crediticia de EPM, confirma el documento.
El proyecto pide permiso para enajenar acciones en ISA, Hidroeléctrica del Río Aures, Gestión Energética S.A, Emgesa, Banco Davivienda, Terpel e Inverseguros.
Además, solicita permiso para enajenar otras participaciones minoritarias en empresas como Gensa, Acerías Paz del Río, Banco Davivienda, BBVA de Colombia y Corficolombiana.
“La enajenación de las participaciones accionarias que hasta ahora se propone no corresponde a una privatización de EPM”, dijo el Alcalde en el documento.
De otro lado, ayer se conoció una carta firmada por el gerente de Hidroituango, José Gustavo Jiménez, en la que se anuncia que, mientras se determine la asignación de responsabilidades frente a la crisis de la hidroeléctrica, no se tomarán como costos del proyecto todo lo relacionado con “obras y acciones adelantadas durante el periodo de contingencia”.
Jiménez indicó que la decisión se tomó el pasado 28 de agosto, luego de que la gerencia presentara “los costos en los que ha incurrido EPM para la realización de obras regulares y de las actividades para la atención de la contingencia, desde los hechos ocurridos el 28 de abril de 2018” .
FUENTE EL COLOMBIANO
España ofrecerá ayuda en diálogos con el Eln
El jefe del Gobierno español, Pedro Sánchez, ofrecerá este jueves al presidente de Colombia, Iván Duque, la disponibilidad de España a colaborar en lo que considere oportuno si decide avanzar en la negociación de un acuerdo de paz con la guerrilla del Eln.
Sánchez se verá con Duque en Bogotá con motivo de la visita que inició ayer a la capital colombiana en el marco de la gira que está realizando por cuatro países latinoamericanos.
No será el primer encuentro entre ambos porque ya se vieron en Madrid en julio pasado cuando Duque aún era presidente electo.
En la reunión de hoy analizarán, entre otros asuntos, las relaciones bilaterales, las de la Unión Europea con América Latina, las intenciones de Duque tanto ante el acuerdo con las Farc como el que podría intentar con el Eln, y el problema migratorio que está suponiendo la salida de venezolanos de su país y la llegada a otros como Colombia.
Respecto a los acuerdos de paz, Sánchez conocerá las intenciones del presidente del país respecto a los cambios que pretende introducir en el que se firmó con las Farc y la posibilidad de que prosiga las negociaciones con el Eln.
Duque tomó posesión como presidente colombiano el pasado 7 de agosto en sustitución de Juan Manuel Santos, y en su discurso en esa jornada comunicó que en los primeros treinta días de su Gobierno evaluará los diálogos de paz que se han desarrollado durante casi año y medio con el Eln para tomar una decisión al respecto
Por tanto, aún no se ha cumplido el plazo que se dio para ello y puede mantener la incógnita sobre su decisión.
A la espera de ella, fuentes españolas avanzan que el presidente del Gobierno le ofrecerá que España pueda acompañar ese diálogo con el Eln si es que decide finalmente que se lleve a cabo y facilitarlo en la forma en que Colombia considere oportuno.
El Gobierno colombiano y el Eln comenzaron en febrero de 2017 unos diálogos de paz en Quito bajo la presidencia de Juan Manuel Santos.
Tras varias vicisitudes, los diálogos fueron trasladados a La Habana en mayo pasado, después de que el presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, retirara a su país como garante y sede del proceso de paz.
El pasado 1 de agosto las partes concluyeron su sexto ciclo de conversaciones sin lograr su objetivo de concretar un cese el fuego bilateral temporal que garantice el avance del proceso de paz.
El presidente del Gobierno ofrecerá hoy también a Duque apoyo ante la implementación del acuerdo con las Farc.
El Ejecutivo español resalta en todo momento que no tiene recetas propias para estos asuntos y que sólo pretende ayudar, y considera que el ofrecimiento puede ser bien recibido por las autoridades colombianas.
Sí pretende recalcar que la paz es un activo insustituible en la nueva etapa que se abre para Colombia.
Respecto a la situación en Venezuela, Sánchez trasladará en persona a Duque su apoyo ante el problema migratorio que supone la llegada a Colombia de venezolanos que huyen de su país.
Alrededor de 2,3 millones de venezolanos han huido como consecuencia de la crisis, según la ONU, y Colombia es el principal receptor, ya que cerca de un millón se han asentado en este país.
Las fuentes españolas subrayan que, al igual que ocurre en Europa, este problema migratorio no es de un solo país, sino de toda la región.
Previsiblemente también estará presente en sus conversaciones la polémica por la recuperación del contenido del galeón español San José.
El Ministerio de Cultura de Colombia publicó a finales de marzo el pliego de licitación del rescate del galeón, hundido en 1708 frente a las costas de Cartagena de Indias, para llevarlo a cabo a través de una asociación público-privada con un presupuesto de unos 58 millones de euros.
Desde el hallazgo, existe un contencioso entre España y Colombia por la titularidad del galeón, ya que el Gobierno español aduce que la Unesco le ampara al tratarse de un “barco de Estado”, mientras que el Gobierno de Juan Manuel Santos había defendido que el tesoro es colombiano.
Según crónicas de la época, el barco iba cargado con cerca de 11 millones de monedas de ocho escudos en oro y plata.
FUENTE EL COLOMBIANO
Competencia partidista podría complicar lucha anticorrupción.
Más que enaltecer la decisión de cerca de 11 millones 700 mil ciudadanos que de manera autónoma rechazaron la corrupción, por encima de ideologías, políticos como Gustavo Petro, Jorge Robledo y Sergio Fajardo hablaron de ganadores y derrotados y de las elecciones de 2019.
Y si bien cuatro proyectos de ley y de acto legislativo recogen aspectos centrales de cuatro de las preguntas que tenía la Consulta Anticorrupción, que por poco alcanza el umbral, la exsenadora Claudia López, una de las promotoras, dijo que están incompletos y que la Alianza Verde presentará los proyectos.
El senador Petro dijo que las iniciativas del Gobierno no servían y casi al mismo tiempo voceros del Partido Liberal también anunciaron que presentarán sus propios paquetes legislativos anticorrupción. Cambio Radical anunció lo mismo, pero para reformar la Justicia y combatir la corrupción en ese sector.
Ante la competencia por abanderar la lucha anticorrupción que desató el resultado de la Consulta, el presidente Iván Duque convocó para mañana, en la Casa de Nariño, a promotores de la Consulta, a los presidentes de Cámara y Senado y a los presidentes de los partidos y sus voceros para “analizar juntos lo que viene en la agenda legislativa para enfrentar a los corruptos con toda la determinación”.
¿Tienen dueño los votos?
Los guarismos de la Consulta no responden a la lógica de uribismo, antiuribismo, derecha o izquierda. En Antioquia, por ejemplo, pese a que es un territorio dominado en lo político por el expresidente Álvaro Uribe, votaron 1,3 millones de personas, potencial que supera los 731 mil votos de Fajardo en primera vuelta, más los de Petro, que fueron 238 mil.
Incluso, de los nueve municipios que en el departamento superaron el umbral, siete están ubicados en el Oriente, territorio donde el uribismo ganó en Congreso y en las presidenciales.
Por eso, según Felipe Botero, doctor en Filosofía Política de la U. de Arizona y docente de la U. de los Andes, los promotores pueden sentirse satisfechos, pero no asumir que esos votos les pertenecen. Agregó que es impensable que alguien plantee estar de acuerdo con la corrupción, lo cual se evidencia en el hecho de que ninguna pregunta obtuvo menos del 99% de votos favorables. “La gente que votó lo hizo con la convicción de que la corrupción es un problema serio que requiere medidas inmediatas”.
Para Pedro Jurado, director de Ciencia Política de la U. de Medellín, si bien los partidos promotores fueron el Polo, la Alianza Verde y el movimiento Colombia Humana, en atención a un tema tan sensible y complejo, se hace difícil que un solo partido o figura pueda sacar todos los beneficios de la consulta
“El escenario ahora es entonces otro porque hay un sentir general de los ciudadanos que hay que recoger teniendo en cuenta lo que se viene: para los partidos, las elecciones regionales y para el gobierno la popularidad para liderar las reformas que intenta sacar adelante”.
Al respecto Carlos Arias, docente de la Maestría en Comunicación Política de la U. Externado, afirmó que la anticorrupción no solo es una moda, es la forma cómo los colombianos han perdido 9 billones de pesos que habrían sido invertidos en mejorar la calidad de vida de todos.
“Quizá por esa razón y a partir de la importantísima votación que obtuvo la consulta, y que muy pocos esperaban, es que tendremos una avalancha de políticos anticorrupción en las elecciones 2019 y 2022”.
El riesgo para la agenda
Si los partidos políticos de oposición, los independientes y los gobiernistas no logran conciliar las iniciativas y todos terminan presentando su propia agenda para capitalizarlo luego electoralmente, se corre el riesgo de que la discusión termine en una pugna y no resuelta la demanda ciudadana.
Según Botero, viene una avalancha “pequeña” de proyectos anticorrupción y mucho político se subirá en ese bus. No obstante, es probable que muchos de los proyectos se queden por el camino, pues el proceso legislativo es lento.
“Un proyecto se demora unos dos años en hacer curso. En 2020 ya ni nos acordaremos de la Consulta y todo seguirá igual”, precisó.
El profesor Arias sostuvo que en vista de que la camiseta anticorrupción hoy tiene más valoración que la 10 de Messi, todos partidos se presentarán como precursores y líderes, “pero la apuesta será, realmente, cómo se haga robusto un paquete legislativo. Es la única forma de que los partidos y candidatos quieran utilizar la anticorrupción como bandera electoral”.
Si en el Congreso todos los partidos hacen un pacto contra la corrupción, rodeado por el Gobierno nacional, se podría avanzar en dos años lo que no se hizo en los últimos 20. La grandeza de los dirigentes está a prueba, porque a luz de los votos del domingo, más que quién lo hace, la gente quiere que se haga.
FUENTE EL COLOMBIANO
El mensaje que la Consulta le envió a la clase dirigente.
Los pronósticos no eran halagüeños. Desde diferentes regiones reportaban una baja asistencia a los puestos de votación. No había transporte gratuito, ni almuerzos o impulsadores; y la mayoría de los políticos prefirieron pasar de bajo perfil, pero, al final, los resultados fueron una sorpresa electoral.
Que casi 11 millones 700 mil personas se hayan movilizado, de manera libre, a votar la Consulta Anticorrupción da cuenta de que así como con otras reivindicaciones y causas políticas, ya esta no tiene color partidista sino que es un propósito de Nación, pese a no haber logrado pasar el umbral.
Los que votaron poco o nada escucharon a los políticos de uno y otro espectro y tampoco tuvieron en cuenta si varias de las preguntas estaban regladas, caminando en el Congreso, o si eran antijurídicas o no resolvían el problema. Es simple: se pronunciaron contra un mal que carcome el erario, frustra e indigna.
Este mecanismo de participación solo sacó un millón de votos menos de los que obtuvo en octubre de 2016 el plebiscito, pese a que en esa campaña volcaron todos los partidos, el sector privado, las iglesias, las instituciones, las universidades y el Estado pleno.
¿Qué sigue ahora?
Hace dos semanas el gobierno de Iván Duque se estrenó con el primer paquete legislativo en el Congreso, y de los proyectos de ley y actos legislativos que presentó, cuatro recogen aspectos que estaban planteados en la Consulta.
Ahora le pisarán el acelerador a estas propuestas, para aprovechar la efervescencia creada en las urnas y el buen recibo de la causa en la opinión. Pero del otro lado, los partidos de oposición también harán lo propio. Previendo el resultado, desde la Alianza Verde tenían un Plan B: anunciaron su propio paquete de proyectos legislativos, que radicarán mañana, y que responden a esos mandatos.
Varios podrán reñir con los presentados por el Gobierno, pero por unidad de materia terminarán fusionados. Desde el Centro Democrático sus congresistas piden ahora que todos los sectores respalden la propuesta del presidente Duque, y desde la oposición piden al Jefe de Estado apoyar sus proyectos.
Ante los resultados, el presidente Iván Duque, en su primera alocución presidencial, afirmó que la democracia fue la protagonista y lamentó que los votos no hayan sido suficiente para alcanzar el umbral. Sin embargo, destacó la fortaleza del sistema democrático.
“Sin importar los resultados, quedó claro que Colombia no aguanta más corrupción. Estos 11 millones de colombianos que votamos, que salimos a las urnas, enviamos un sonoro mensaje de rechazo al permanente saqueo de los recursos públicos. Es el mismo rechazo que se expresó en las urnas el pasado 17 de junio”.
El mandatario aprovechó para pedirles a los congresistas de todos los partidos responder a este clamor ciudadano con la rápida aprobación del paquete legislativo que su Gobierno presentó contra la corrupción. (Ver recuadro).
La exsenadora de la Alianza Verde Claudia López, ideóloga y principal promotora de la Consulta, afirmó que se hizo historia, porque obtuvo no sólo la mayor votación de cualquier mecanismo de participación sino una mayor a la de cualquier Presidente en la historia de Colombia.
“Con el único incentivo de su conciencia la ciudadanía salió masivamente a votar. La votación le ordena al Congreso y al presidente autorreformarse, aprobar estos siete mandatos anticorrupción y recuperar los 50 billones de pesos que le están robando a los colombianos, en lugar de subir impuestos”.
Óscar Castelblanco, docente de Derecho de la U. Libre, dijo que ahora se deben usar mecanismos eficientes para atacar la corrupción y que para eso son claves la reforma política (listas cerradas y voto obligatorio), a la justicia (calidad de jueces), a la educación, acabar las contralorías departamentales y municipales y poner lupa a las CAR.
“Las promotoras tienen que dar la cara y reconocer que la gente se dio cuenta de que había preguntas antitécnicas e inviables y que se reconozca el fracaso de la misma”.
El centavo para el peso
La personalización que por momentos tuvo el debate sobre la Consulta entre la exsenadora López, el senador Gustavo Petro y el expresidente y senador Álvaro Uribe y varios de sus alfiles, alejó a quienes no querían más polarización.
Pese a que sus promotores dijeron que no se trataba de una revancha política, uno de ellos, el senador Jorge Robledo, del Polo Democrático, manifestó que “El Frente Nacional Duquista obtuvo una derrota”.
Para Jaime Duarte, docente de Gobierno de la U. Externado, no alcanzar la votación suficiente es una demostración de la indiferencia de mucha gente, pero que el mensaje es esperanzador. “Los promotores ayudaron a polarizar mucho y eso no le hizo bien al ejercicio, porque se volvió una cacería de brujas, que no unía si no que desunía”.
En contraposición Pedro Pemberthy, docente de Ciencia Política de la U. Nacional, dijo que fue un fracaso, porque pese a que eran preguntas “taquilleras”, no fueron capaces de motivar. “Les faltó pueblo. La idea era que saliera desde la sociedad civil, no que fuera una pelea entre los mismos”.
El resultado político
Miguel Silva, profesor del Instituto de Estudios Urbanos de la U. Nacional, dijo que fue un resultado histórico, sobretodo por las limitaciones de recursos. “Quedan mal las fuerzas que votaron aprobando la Consulta en el Congreso y luego la sabotearon convocando a la abstención”.
Según Pedro Piedrahíta, doctor en Derecho Internacional y profesor de Ciencia Política de la U. de Medellín, quedó abonado un capital político para un sector alternativo que propone una nueva forma de hacer política.
“Es un símbolo de rechazo, pero así mismo esto no va a resolver el problema de la corrupción. Por otro lado, queda el terreno listo para la candidatura de López en Bogotá y para muchos quemados de las pasadas elecciones que promovieron la consulta”.
A partir de mañana empieza una nueva competencia en el legislativo, porque quedó demostrado ayer que la bandera anticorrupción es popular y de muchos votos.
Habrá una hiperinflación de proyectos para combatir la corrupción, pero los intereses de cada colectividad podrían terminar truncando el mensaje que enviaron los votantes.
FUENTE EL COLOMBIANO


